VIEJAS DE MIERDA

A lo largo de mi vida, como familiar de comerciantes y cajero en este ultimo tiempo, me ha tocado ser testigo y lidiar con viejas de mierda... esas que vienen al negocio con el solo fin de romper las terlipes. En lo personal no creo que tengan maldad, quiero creer que lo hacen por el solo echo de combatir el aburrimiento de su vacía y rutinaria vida.

Tres de estas mujeres han marcado mi vida y las llevo siempre en el recuerdo, me hacen reir, aunque en su momento me dieron ganas de mandarlas bien a la mierda.

Selva es una mujer que iba a comprar a la Verdulería & Carniceria de mi hermano y de mi hermana. Una vez fui de visita y justo esta mujer fue a comprar... su sola presencia molestaba, su manera de caminar, de mirar y de criticar detalles como que el piso tenía una manchita, que el vidrio del mostrador estaba empañado, etc. En un momento le pide a mi hermana cebollas, mi hermana le pregunta "¿Grandes o chiquitas?" y ella (Excelente respuesta) le dice "Medianas" y mi hermana meta a buscar cebollas medianas... mientras la vieja remataba con un "Que linda esta plantita"

Otra vez, en la época que trabajaba en la carnicería de mi madre, vino la vieja María -Así le decimos con mi mejor amigo a la madre de su tía- a comprar y derrepente, muy enojada se acuerda que "¡La carne picada que compre el otro día me salio dura!". Con mi hermano no podíamos creer semejante barbaridad... "¿Como?" nos preguntabamos por dentro. Es imposible algo semejante ¡Está picada!, pero la dejamos que se exprese, no valía la pena discutir "El cliente siempre tiene la razón".

De todas maneras la que se lleva mi admiración a la hora de romper las pelotas es una vieja que hace unos meses en la heladería decía con toda la furia "Esta no es sucursal de la otra, no es el mismo helado", "Si señora, es sucursal, el helado lo hacen en la otra y todas las tardes lo traen acá, es del mismo dueño", le contestaba yo. "No, no es, se nota el helado no es el mismo, usan el mismo nombre pero no es del mismo dueño" Reclamaba ella. "Si, señora yo trabajo en las dos y créame, el que me paga el sueldo es la misma persona".

La vieja seguía diciendo que no era verdad, una vez sentada toma su helado de chocolate y dice "Esto no es chocolate, tiene gusto a no sé... café... me diste café". "No señora, aca no hay sabor café, en la sucursal grande si, acá no" Le dijo el heladero. "No, ésto no tiene gusto a chocolate"... gira el helado y vuleve a probar y dice "Acá en esta partecita si, tiene gusto a chocolate" (?) y siguió tomando su heladito de 4 pesos.

En esos momentos rogaba por que vinieran de la otra sucursal a traer el helado asi le cerraban el upite, porque no nos creía y hasta los clientes le decían que estaba equivocada. De todas maneras yo creo que la vieja sabía que dueño es el mismo y por ende el helado tambien... pero solo quería jugar un rato.

Que se le va a hacer... viejas de mierda hay en todos lados puede ser tu abuela, tu madre o tu vecina, y las padecemos todos, tanto los comerciantes como los clientes...
¿Ustedes tuvieron esa suerte?